Reconocer los errores
El reconocer un problema es el primer paso para encontrar la solución o la cura. A veces, un mal hábito es como una mancha negra en el rostro, es visible para todo el mundo menos para uno mismo.
Autodeterminación
¿Cuán a menudo te encuentras a ti mismo usando palabras ofensivas? Existen ciertos momentos en los que usas más malas palabras que en otros (por ejemplo, cuando estás con amigos, cuando estás enojado con alguien o frustrado por algo). ¿Alguna vez alguien ha desaprobado o se ha ofendido por el lenguaje vulgar que usas?
Si eres honesto contigo mismo y no caes en la negación, pronto te darás cuenta si tienes el mal hábito de usar un lenguaje vulgar. Si lo haces, debes reconocer que es pecado que abuses del don del habla que Al-lah te ha concedido, utilizándolo de una forma impropia para un musulmán. Los musulmanes son vistos como representantes de su fe, y el usar un lenguaje vulgar, incluso como broma, llevará a la conclusión de que todos los musulmanes lo hacen, aunque solo sea una persona.
Si no usas malas palabras pero tienes amigos o parientes que lo hacen, trata de advertirles de ese mal hábito de una manera gentil.
Aceptar la responsabilidad y arrepentirse
Puede sonar raro arrepentirse por unas cuantas malas palabras pronunciadas en broma, pero piensa en las palabras del Corán que dicen (lo que se interpreta en español): {Le hemos dotado de dos ojos, de una lengua y dos labios. Y le aclaramos los dos senderos [el del bien y el del mal].} [Corán 90:8-10]
Al-lah, Exaltado sea, nos Ha informado que somos responsables por todo lo que decimos y hacemos, y el Día del Juicio seremos preguntados acerca de cómo usamos las facultades que Él nos Dio. Seremos recompensados si usamos nuestros órganos y facultades de la mejor manera y por la causa de Al-lah. Seremos castigados si abusamos de ellos y los usamos haciendo cosas indebidas que desagradan a Al-lah.
Debemos recordar que en el Día del Juicio, los órganos de nuestro cuerpo serán nuestros testigos a favor y en contra. Al-lah Dice: {El día que sus propias lenguas, manos y pies atestigüen contra ellos por lo que cometieron.} [Corán 24:24]
Si realmente creemos en las palabras del Corán y en el Día del Juicio, no vacilaremos en arrepentirnos ahora mismo, mientras aún hay tiempo, de todos nuestros pecados y errores, para así evitar el castigo eterno y la humillación.
Desanimar a otros
Los musulmanes tienen una responsabilidad enorme de hacer el bien y prohibir el mal en toda circunstancia y en todas sus formas, especialmente si el mal es una falla común que tiene el potencial para esparcirse hacia otros. La gente que es vista como activa y practicante en la comunidad tiene una gran responsabilidad de demostrar su desaprobación hacia el lenguaje vulgar y no dejarlo pasar cuando ocurre en su presencia. Si los musulmanes permiten que el leguaje vulgar pase desapercibido en sus hogares y comunidades, es como si estuvieran dando su aprobación tácita, y así se irá esparciendo lentamente y se volverá socialmente aceptable. El Profeta, sallallaahu alayhi wa sallam, dijo: “Quien vea algo malo debe cambiarlo con su mano (es decir, físicamente). Si no puede hacerlo, entonces con su lengua (verbalmente); y si no puede ni siquiera eso, entonces en su corazón (detestándolo). Ese es el nivel más bajo de la fe”. [Muslim]
También, Ibn Mas’ud, que Al-lah Esté complacido con él, reportó que el Profeta, sallallaahu alayhi wa sallam, dijo: “No existió ni un solo profeta entre aquellos que fueron enviados antes de mí que no tuvieran apóstoles y compañeros que siguieron su camino y obedecieron sus órdenes. Pero después vinieron otras generaciones cuyas palabras desmintieron sus hechos y cuyas acciones no estuvieron de acuerdo con lo que ellos ordenaban hacer a otros. Quienquiera que luche contra ellos con sus manos es un creyente. Quien luche contra ellos con su lengua es un creyente. Y quien luche contra ellos con su corazón es un creyente. Pero cuando ninguna de estas cosas son hechas, entonces no existe ni una cantidad mínima de fe”. [Muslim]