¿Es obligatorio prohibir el mal mientras uno reza?
Las alabanzas sean para Al-lah, Señor y Creador del universo, y que Su paz y Sus bendiciones sean con el Profeta Muhammad, con todos sus familiares y todos sus discípulos.
La oración en un gran acto de adoración y no es permisible para nadie interrumpirla o hacer algo que la anule, incluso si fuera por una buena acción. En un hadiz auténtico, el Profeta, la paz y las bendiciones de Al-lah sean con él, dijo: “La oración requiere de toda la atención de uno” (Al Bujari). Sin embargo, hay excepciones en casos de extrema necesidad, como salvar a alguien de un peligro inminente, etc. En tales ocasiones uno puede dejar de rezar y cometer un mal menor (interrumpir la oración) para prevenir uno mayor. En el Tarh At-Tathrib fi Sharh At-Takrib se menciona en el incidente del beduino que orinó en la mezquita que uno debe apresurarse a prevenir el mal y educar al ignorante, y que no debemos dilatar esto una vez que vemos que se comete una mala acción. Habiendo dicho esto, si vemos que se comete una mala acción mientras estamos rezando debemos seguir con el acto de adoración y esperar hasta concluir para corregirla o enseñarle a la persona sobre ello, como se menciona en el hadiz narrado por Al Bujari. El resto de este relata que, una vez que el Profeta, la paz y las bendiciones de Al-lah sean con él, finalizó su oración, le prohibió al hombre hacer eso (y le enseñó). Esto es en el caso de que el posible daño no afecte a otros; si es eso posible, como ver a alguien matando a otra persona sin derecho, etc., entonces se torna obligatorio interrumpir la oración y hacer todo lo posible para frenar ese mal.
Y Al-lah sabe más.