Alabado Sea Al-lah, Señor del Universo. Doy testimonio que nada ni nadie merece ser adorado sino Al-lah, y que Muhammad, sallallaahu ‘alayhi wa sallam, es Su siervo y mensajero.
Si las aves son de las que se permite comer su carne, entonces su excremento es puro, y no es obligatorio lavar la ropa para quitarlo. Y si ha rezado y en su vestido hay algo de este excremento, su oración será válida, porque la orina y el excremento de los animales cuya carne se puede comer son puros, al igual que la carne. Sin embargo, es mejor que quien reza se presente ante Al-lah, el Majestuoso y el Poderoso, con vestidos limpios, sobre todo porque algunos ulemas consideraron impuro el excremento del ave cuya carne se permite comerla, como es la opinión del Imán Ash-Shafi‘i, que Al-lah le dé Su perdón, y una de las dos opiniones transmitidas del Imam Ahmad, que Al-lah le dé Su perdón, al respecto.
Por eso, es mejor prevenir, lavando la ropa del excremento del ave cuya carne es lícito comer.
Pero el excremento del ave cuya carne no está permitido consumir, se considera impuro, y hay que lavar el vestido. Y quien haya rezado con él antes de lavarlo, su oración no será aceptada por no haber cumplido con una de los requisitos fundamentales del rezo: quitar toda impureza de la vestimenta.