Alabado Sea Al-lah, Señor del Universo. Doy testimonio de que nada ni nadie merece ser adorado sino Al-lah, y que Muhammad, sallallahu ‘alaihi wa sallam, es Su Siervo y Mensajero.
Las enormes virtudes del Hayy, como el perdón de los pecados y que es una causa de la elevación de los grados en los que estarán las personas en el Paraíso, han sido establecidas y confirmadas por los textos del Corán y la Sunnah. Por lo tanto, hacer el Hayy es mejor que la Sadaqah (donación, limosna o ayuda voluntaria), a menos que sea para ayudar a un familiar necesitado; dijo el Shaij del Islam Ibn Taimiah, que Al-lah lo Tenga en Su misericordia: “…pero si tiene familiares que tengan algún tipo de necesidad económica extrema, entonces la Sadaqah es mejor, al igual que ayudar a personas que estén en la misma situación; pero si se trata de una ayuda a personas que tienen necesidades no urgentes, pues entonces el Hayy es mejor”.
Le recordamos a todo aquel que no ha realizado el Hayy que si tiene las posibilidades económicas y físicas para cumplir con este deber, no deben retrasarlo por más de cuatro años, pues así lo señaló el Profeta Muhammad, sallallahu ‘alaihi wa sallam, cuando dijo: “Ciertamente Al-lah, Altísimo sea, dijo: ‘Un Siervo Mío al que He Favorecido con riqueza y salud, y pasan cuatro años, no le beneficiará en nada que haga el Ihram al quinto año (es decir, que no le beneficiará disponerse a realizar el Hayy)’”. [Abu Ia’la e Ibn Hibban]