{…Lo que hagáis de bien Al-lah lo Sabe…} [Corán 1:197]

¿Cuándo fue la última vez que hiciste algo solo por la causa de Al-lah?

Esto podría hacerte sentir bien, fortalecer tu fe, y el tiempo libre que solías pasar en frente del televisor podría ser remplazado con ejercicios e ilustración… en otras palabras, tiempo bien gastado.

Ahora, imagina si estuvieras por comenzar algo tan maravilloso que puede sacar a una comunidad de su estancamiento y propiciar actividades de calidad orientadas a la familia para el beneficio de todos y cada uno de los miembros de la misma.

¿Qué podría ser esto?... La respuesta: un cambio de imagen a la mezquita.

El hecho es que muchas de nuestras, una vez hermosas, mezquitas han sido muy descuidadas. Todos sabemos esto, pero nunca queremos hablar sobre esto o hacer algo al respecto.

La mayoría de las mezquitas a lo largo de América necesitan mantenimiento; sin embargo, tristemente, muchas veces los fondos son difíciles de conseguir o no son suficientes para afrontar la contratación de trabajadores permanente que constantemente estén haciendo mantenimiento del edificio y los jardines. La mayor parte de los esfuerzos son dejados a una o dos personas que hacen lo mejor que pueden, pero el trabajo de mantenimiento de una infraestructura grande y regularmente utilizada, es una carga muy pesada como para que una sola persona la pueda llevar.

El mantenimiento de la mezquita es un asunto importante en muchas ciudades, pero también es algo sobre lo que todos podemos ayudar, y esto no costaría mucho dinero, solo un esfuerzo dedicado.

La jardinería también es una parte importante de la imagen, y nada es más placentero que ver una mezquita cuyos jardines están cuidados y adornados con hermosas flores y plantas. Dice el Corán (lo que se interpreta en español): {Que reflexione el hombre sobre su alimento; Nosotros Hicimos descender el agua en abundancia, luego Hendimos la tierra [para que brotase la vegetación]. Hicimos Surgir de ella granos, vides, hierbas, olivos, palmeras, frondosos huertos, frutos y forraje, para vuestro beneficio y el de vuestros rebaños.} [Corán 80:24-32]

Durante las vacaciones, cuando los niños no tienen clases y tú tienes todas esas manos extra con todo ese tiempo libre, comienza una tradición que podría poner en marcha una misión para toda una comunidad. Tu esfuerzo y trabajo duro no pasarán desapercibidos, in sha Al-lah, eventualmente traerá sonrisas a los miembros de la congregación e incluso a los vecinos no musulmanes que pasen por el lugar.

Sembrando las primeras semillas

“Si un musulmán planta un árbol o siembra un campo, y los hombres y las bestias y los pájaros comen de este, todo eso es caridad de parte de él”. [Muslim]

Las semillas que siembres no solo serán una fuente de belleza, sino que además inculcarán valores en la comunidad.

No hay nada más divertido o memorable, tanto para niños como para adultos, que trabajar duro, ver los frutos de sus esfuerzos y estar orgullosos de ellos.

El ejemplo que des a tus hijos y a los niños de la comunidad será imitado por años, in sha Al-lah, en muchas más formas de las que puedes imaginar.

El trabajo duro que beneficie a tu mezquita y a tus hermanos en la religión es primordial para acercar a los miembros de nuestra comunidad.

In sha Al-lah tus hijos desarrollarán amistades cercanas en el proceso de estos tipos de trabajos en proyectos para la comunidad, amistades que durarán de por vida. Este es un método comprobado que incentiva el ejercicio, y ayuda a cerrar la brecha de la soledad para los niños cuyas escuelas giran en torno a todo, menos al Islam.

Haciendo un plan

Antes de comenzar cualquier plan para hacer cualquier cosa en la mezquita, es importante obtener el apoyo y permiso de la comunidad. Si tu comunidad te respalda en tu plan de cambio de imagen, es probable que ellos también echen una mano y posiblemente financien completamente el proyecto con la ayuda de donaciones de los miembros de la comunidad.

He aquí algunas ideas para ayudarte a comenzar: